En Écija desciende un 15,7% los establecimientos hosteleros
En el Anuario Económico de España elaborado por La Caixa, se recogen datos relacionados con los bares en los últimos años. Según los mismos, existe una tendencia a la bajada en Sevilla y provincia. En ninguno de los municipios de Sevilla creció el número de bares y restaurantes y sólo en uno, Espartinas, se mantuvo el mismo número entre los años 2007 y 2012.
Las cifras revelan una importante caída del número de negocios de un sector que durante los últimos años parecía mantenerse como uno de los menos afectados por la crisis económica, de modo que hubo hasta quien habló de la nueva burbuja de los bares.
El descenso se dio tanto en Castilleja de Guzmán, que sólo tiene dos bares, como en la propia capital hispalense, donde hay 3.872.
Los porcentajes de pérdidas en la provincia en el último lustro, oscilan entre el 8,1 % de Alcalá de Guadaira y el 66,7 % de Castilleja de Guzmán.
Algunos de los ejemplos más representativos son: Utrera, con 229 y un descenso del 10,2%. En el siguiente escalón están La Rinconada, con 180 y una bajada del 16,5%; Morón de la Frontera, con un 173 y una caída del 17,4%; y Écija, con 167 y un descenso del 15,7%. Le siguen Mairena del Aljarafe, con 152 bares y un 18% menos en el último lustro; Camas, con 151 y un 19,9% menos; y Carmona, con 150 negocios, lo que supone el 15,8% menos que en el año 2007. Por encima del centenar de bares también están Los Palacios y Villafranca, con 142, Coria del Río, con 131, y Lebrija, con 106.
Está claro que siempre han existido muchos, pero es que ahora se une la competencia sucia que tienen que sufrir de vendedores ambulantes y kioskos de churros ilegales, que no pagan sus impuestos.