UN ECIJANO, DIEGO DE ÁVALOS Y FIGUEROA, POETA EN LA AMÉRICA ESPAÑOLA DEL SIGLO XVI por Ramón Freire Gálvez
Ramón Freire Gálvez.
Enero de 2014
DIEGO DE ÁVALOS Y FIGUEROA, nació en Écija, el día 7 de Noviembre de 1552, siendo bautizado el mismo día en la Parroquia de San Juan, hijo de Tello de Aguilar y María de Ávalos, apadrinado por Francisco de Figueroa y Alonso de Zayas y madrinas Luisa de Perea y Anadea Quirós (Libro de Bautismos 4, página 92, Iglesia de San Juan).
El uso indistinto de los apellidos, que en los siglos XVI y XVII se hicieron por parte, sobre todo, de los caballeros y personas ilustres, con renuncia a llevar el de sus ascendientes y tomando, a su libre arbitrio, el de sus antepasados o de los familiares más o menos directos, también tuvo lugar en este personaje, que tomó el nombre y apellidos de su abuelo materno Don Diego Dávalos, aunque la realidad es que su apellido verdadero es el de Ávalos y no Dávalos como figura en todas las biografías y publicaciones donde se hace referencia al mismo, confundiendo quizás en aquella época la pronunciación en el apellido de su abuelo, que era de Ávalos, reflejándose como Dávalos.
Fue Diego de Ávalos y Figueroa, uno de los ecijanos que, con espíritu aventurero y renunciando al bienestar familiar, en el último tercio del siglo XVI, marchó a la América española. Estuvo en Panamá, Perú y el final de sus días fueron en La Paz (Bolivia).
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UN ECIJANO, DIEGO DE ÁVALOS Y FIGUEROA, POETA EN LA AMÉRICA ESPAÑOLA DEL SIGLO XVI
A continuación, el Portal Temático de Écija, en su deseo de contribuir al máximo con la difusión de nuestra cultura, ha localizado en internet la primera parte íntegra del libro de D. DIEGO DE ÁVALOS Y FIGUEROA : ” LA MISCELANEA AUSTRAL” ( openlibrary.org) publicada en Lima (Perú) en el Año 1602
Muy interesante su articulo, Sr. Freire. Suelo seguir con cierto interés sus publicaciones, por lo que aportan a la historia de nuestra milenaria ciudad, por otra parte tan prolífica en hechos y personajes. Alguna de sus publicaciones he adquirido.
Hay un tema que me gustaría sugerirle, como fuente de investigación; la existencia en las Filipinas en la isla de Luzón de una provincia denominada “Nueva Ecija” de la que supongo que estará al tanto, pero de la que no conozco que haya dirigido nunca sus acertadas indagaciones.
Disculpe mi atrevimiento y reciba un saludo desde Granada.
Agradecido le quedo por su comentario y le hago saber que uno de mis pròximos artículos biográficos será dedicado al ecijano Rafael María de Aguilar, que fue precisamente el que dio el nombre de Nueva Ecija al que usted se refiere.