Francisco J. Fernández-Pro

Decía que…

Parece mentira, pero si es increíble lo de Diego Valderas, casi más increíble es lo del Portavoz de IU justificando lo injustificable como algo “cotidiano”…

Después de muchos años en la política, creo que lo mejor que tienen las Ideologías -de izquierdas o de derechas- es que, cada cual como entiende, tratan por todos los medios de cambiar las cosas que, en nuestra Sociedad, están mal hechas o se hacen mal… y, si nos referimos a las ideologías de izquierda, nos referiremos sobre todo a aquellas que, “por habituales“, tanto y tan mal afectan a las clases más desfavorecidas (al menos es lo que suelen propugnar, abanderar y atribuirse casi en exclusividad).

Por tanto, justificar la barbaridad deontológica de Valderas (cometida a favor de la especulación más feroz y contra todo gesto de solidaridad ciudadana y amistad vecinal), calificándola como algo que “todo el mundo hace cotidianamente”, es la peor forma de estercolar a la Ideología de IU y al líder de los sectores andaluces de izquierda (que ya, de por sí, se echó bastante mierda encima con un comportamiento tan revelador para todo el que no lo conoce, ni conoce las tendencias de los que lo apoyan, lo eligieron y lo sostienen en el cargo más significativo de la Izquierda oficial que tenemos en Andalucía).

El artículo en cuestión:

IU defiende que Valderas [Diego Valderas, vicepresidente de la Junta de Andalucía] se quedara con el piso de un desahuciado a precio de saldo

No quiso pagar a su vecino ocho millones para que se librara de la deuda y lo compró en subasta al banco por cinco.

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