MUNDA (I) por Francisco J. Fernández-Pro
Tenemos la mente estrecha y nos falta fe en nosotros mismos.
Quizá todo el problema estribe en eso: en que a los ecijanos nos falta fe para creernos lo que somos o lo que debíamos ser; nos falta compromiso para asumir nuestro rol como ciudad y como Cabecera de Comarca de la Campiña; nos falta decisión, iniciativa, valor o huevos –si lo prefieren-, para abordar el futuro con proyectos de una cierta envergadura.
En estos últimos años hemos presenciado un espectáculo del que deberíamos sentirnos orgullosos todos los ecijanos: la recuperación, no sólo de la memoria de nuestra ciudad como Colonia Augusta Firma romana, sino la certeza de la indiscutible categoría que Astigi tuvo entre las más importantes ciudades del que fue el mayor Imperio del Mundo antiguo.
Fruto del arduo y fructífero trabajo emprendido hace tres lustros (gracias a la colaboración iniciada a mediados de 1995, con el Departamento de Historia Antigua de la Universidad Hispalense, a través de Genaro Chic, Pedro Sáez y Sergio García-Dils, además de Jesús Muñoz Tinoco), es el rescate de esa memoria y el de innumerables piezas arqueológicas (algunas de ellas de inmenso valor), que hoy podemos admirar en nuestro Museo Histórico.
Pues bien, a pesar de todo lo conseguido hasta ahora, hemos dejado en el mayor abandono uno de los más ambiciosos e ilusionantes proyectos que se emprendieron en su momento y que debería haberse proseguido o retomado hace mucho tiempo: la recuperación de la Ciudad y la Batalla de MUNDA.
Escribir sobre lo que fue la ciudad de Munda y lo que representó la Batalla que se libró ante sus murallas, sería escribir innecesariamente sobre lo sabido (cualquiera puede abrir un libro o consultar Internet); pero hay que decir –ya que tratamos sobre el tema- que la de Munda, vista sus consecuencias, fue una de las batallas más importantes para la Historia del Mundo Occidental.
En ella –y sólo por refrescar la memoria-, Julio César se enfrentó a los hijos de Pompeyo. Fue la última gran batalla: la definitiva de la Guerra Civil de Roma. A partir de su victoria, César fue proclamado Dictador de la República y, unos años después, pudo legar su poder a César Augusto que, a la postre, se convertiría en el primer emperador de Roma y fundador de Astigi como Colonia Augusta Firma.
Por tanto, no es gratuito afirmar que el resultado de esta Batalla fue fundamental para Écija y para la Historia del Mundo Occidental. Tanto es así que, durante siglos, infinidad de investigadores intentaron hallar su ubicación, descifrando los datos de la única crónica fiable y contemporánea a la contienda, el “Bellum Hispaniense” (atribuido al mismo César o a uno de sus generales)
Pues bien, tras multitud de estudios, de investigaciones y de propuestas, tras el detonante que, en los años ochenta, supuso la publicación por Vicente Durán Recio, de su obra “La Batalla de Munda”, la mayoría de historiadores y autores de cierto rigor, comenzaron a decantarse, claramente, por la hipótesis de su ubicación ecijana. De forma, que hoy son muy pocos los que –a la luz de los datos y la lógica- dudan que la famosa batalla se diera en los Llanos del Águila, en el Término Municipal de Écija, muy cerca de la Lantejuela.
Por desgracia, durante mucho tiempo, por intereses o por ignorancia, les fue asignada su localización a otras ciudades y algunas de ellas –como el caso de Montilla- fundamentaron casi todo su pasado en la hipótesis de este protagonismo… y ahora, lógicamente, se resisten a reconocer lo que es obvio.
Personalmente, siento un sabor agridulce cuando pienso en los montillanos. Por un lado, me entristece que pierdan uno de los pilares básicos de un pasado que han ido construyendo a través de un siglo, pero todos sabemos que la Historia hay que construirla sobre hechos probados (otra cosa son las conjeturas que queramos creernos). Sin embargo, por otro lado, los envidio sanamente por la conciencia que, desde hace muchos años, asumieron sobre Munda, sobre su trascendencia, sobre el privilegio que supone pertenecer a un lugar que es Historia, sobre el potencial que representa para la propia Ciudad, el protagonismo de un hecho tan relevante para el mundo entero. Los envidio por sus iniciativas: los monumentos sobre Munda, las jornadas sobre Munda, los videos sobre Munda, el Cross de Munda y, si me aprietan, hasta el nombre de Munda etiquetado en sus botellas de vino.
A nosotros –a los ecijanos-, a los que sí contamos con el aval de los datos (cada vez más firme y, sobre todo, menos discutible desde que se descubrió el asentamiento de Cárruca en el Cortijo de los Cosmes), nos faltan la conciencia, la decisión, la iniciativa, el valor o los huevos -si lo prefieren- que han demostrado y están demostrando los montillanos, a la hora de defender lo que creen propio.
Personalmente reconozco que me es indiferente si la célebre batalla, que certificó el fin del sistema oligárquico romano para dar paso de forma abierta a un régimen personalista y populista, tuvo lugar en las proximidades de Astigi o en otro lugar, pero como bien dices todos los datos más firmes apuntan en la dirección que Vicente Durán revivió con firmeza. Aparte de la topografía, el desarrollo posterior de los hechos, con la colonización a la manera romana de la antigua ciudad indígena de Astigi y la contemporánea reestructuración del territorio desde del punto de vista administrativo ayudan a explicar mejor el florecimiento del valle del Genil (Singilis)y de la capital del que se llamó en adelante Convento Jurídico Astigitano, una de las cuatro partes en las que se dividió la Bética para su mejor administración. Búsquese el desarrollo de la ciencia y el desarrollo se dará por añadidura. Está comprobado.
Dicen que donde hay patrón no manda marinero. Y yo, parafraseando el dicho, digo que donde habla el Maestro, el alumno escucha;… pero si, además, el Maestro -con su intervención- le ofrece al alumno, más argumentos para sus hipótesis, ya no puede callarse: tiene que agradecérselo (que también se dice que, de bien nacidos, es ser agradecidos)
Gracias, Maestro.
Gracias, Amigo.
No sí al final hasta aparecerá Munda. Aquí hay otra propuesta, muy cerca de Écija.
http://www.eldiadecordoba.es/article/ocio/1737669/santaella/lo/es/santaella.html