MUERTE DEL CAPITÁN ECIJANO FRANCISCO DE AGUILAR MANUEL Y AVELLANEDA, CABALLERO DE LA ORDEN DE SAN JUAN, EN LA JORNADA DE BRASIL, MIÉRCOLES 2 DE ABRIL DE 1625 por Ramón Freire
Octubre de 2015
Ramón Freire Gálvez.
Nos dice la bibliografía consultada, someramente, que La jornada del Brasil fue una expedición militar hispano-portuguesa llevada a cabo en 1625 contra las fuerzas holandesas que ocupaban la ciudad de Salvador de Bahía, como extensión de la guerra de Flandes o Guerra de los 80 años que en aquellos tiempos se libraba en los Países Bajos.
Tras la captura en 1624 de la colonia portuguesa de Salvador de Bahía por parte de la flota de las Provincias Unidas de los Países Bajos junto a la de la Compañía Holandesa de las Indias Occidentales, Felipe IV, rey de España y Portugal, ordenó armar una flota conjunta hispano-portuguesa con el objetivo de recuperar la ciudad. La parte portuguesa de la armada partió de Lisboa al mando de Manuel de Meneses y la parte española de Cádiz bajo el mando de Fadrique de Toledo a finales de 1624 y principios de 1625; unidos atravesaron el océano Atlántico y, al llegar frente a Salvador, la asediaron durante un mes, al cabo del cual se consiguió la capitulación.
Pues bien, dentro de esa batalla que se denominó La Jornada de Brasil por los historiadores, falleció un capitán ecijano, de apellidos ilustres, llamado FRANCISCO DE AGUILAR MANUEL Y AVELLANEDA, hijo de D. Benito de Aguilar Ponce de León y de doña Elvira Manuel de Santillán y Marmolejo.
De él y de sus hermanos, se hizo eco en el año de 1632 el Ldo. Andrés Florido (contemporáneo y conocedor de dicha familia), cuando escribe en su libro Grandezas de Écija, Adición al libro de Écija y sus Santos, lo siguiente: …y en guerra han sido y son eminentes: “…Cuatro caballeros ilustres, hermanos todos de padre y madre, naturales de nuestra patria, los tres del hábito de San Juan y de Calatrava el mayor, son el asunto de este párrafo…(Se refiere a 2 los hijos del anterior matrimonio, llamados Luis de Aguilar Ponce de León, General Luis de Aguilar y Manuel, Caballero del Orden de San Juan y Comendador de Vadillo, soldado durante muchos años, Capitán Francisco de Aguilar y Manuel, del mismo hábito y Capitán Pedro de Aguilar, Guzmán y Manuel, caballero de la misma Orden (que después de muchos años de servicio murió) y a Doña Elvira Ponce de León y Manuel que casó en Écija con Don Fernando de Zayas, mayorazgo y cabeza de los Zayas… Fue en ella también D. Francisco de Aguilar Manuel, que habiendo servido, como su hermano, a la religión en muchas ocasiones, como fue cuando teniendo poca salud, salió a pelear de los primeros a la defensa de la Isla, por haber desembarcado una armada del turco mucha gente.
Anduvo valeroso, pues herido y con orden de retirarse, sustentó el tesón de la batalla desde el amanecer de aquel día, 25 de Marzo de 1614, hasta la noche que se retiraron los enemigos. Sirvió en los galeones de la guarda de las Indias dos años, asistiendo, por la pérdida de la capitana en el banco de Sanlucar el año de 1621, para sacar el azogue y la artillería.
Hacemos un paréntesis en la relación que hace Florindo para aportar que en el Archivo de Indias (foto de la derecha), encontramos una relación de méritos, anterior a su muerte, fechada al año de 1623, Signatura INDIFERENTE, 161, N, 63 que dice: Relación de Méritos y Servicios de Francisco de Aguilar y Manuel, caballero de San Juan, sirvió en Berbería, Levante y las Indias, en rescate de navíos.
Siguiendo al Ldo. Florindo, continúa sobre el capitán ecijano: Y al año siguiente en la pérdida de tres galeones a cuyo remedio salió de la Habana, acudió también, que en la una y la otra ocasión se puso remedio conveniente a todo por su industria y se libró la plata muy a satisfacción de sus generales.
Hizo por orden del Marqués de Cadereta relación a su Majestad de esta última pérdida y del remedio que le puso y le hizo merced de una compañía que levantó en esta ciudad, aunque con brevedad, muy lúcida, con la cual se halló con D. Juan Fajardo en el estrecho en la batalla de la armada holandesa, de donde salió herido.
Después de haber aquí servido dos años, fue, como tengo dicho a la jornada del Brasil, donde habiendo llegado, quedó D. Luis de Aguilar y Medina en los navíos por cabo de la gente para asegurar con su persona el riesgo que se temía de armada, como vino al fin al socorro, pero volviose luego por haber llegado muy tarde y estar en la ciudad y el puerto en defensa.
Salió D. Francisco Manuel a tierra, donde se le encargó el puesto de más riesgo, el miércoles 2 de Abril de 1625 (Bahía de Todos los Santos). Saliendo el enemigo de la ciudad, asistió el primero a la defensa de las trincheras; peleó con mucho valor rindiendo cuerpo a cuerpo al capitán que gobernaba aquella tropa y entregándole preso a su alférez, siguió el alcance; dieronle dos mosquetazos en el pecho, de que cayó en el suelo; defendióle la vida el peto fuerte que abollado es testigo de la verdad; levantose con gran presteza y peleando le derribaron con otro la mano izquierda. Y aunque tuvo orden de retirarse, no lo hizo, antes terciando la pica debajo del brazo herido, respondió que él no se retiraba; verdad que muriendo la acreditó con grande estrago de sus contrarios. Y con serlo el capitán que prendió, hizo muestras de sentimiento, como de gusto los de la ciudad, brindando aquella noche, por verse libres de un caballero tan valeroso. Así lo escribieron a Holanda, viniendo la carta a manos de su Majestad. Si bien quedaron tan atemorizados que no osaron salir otra vez a campaña; antes luego trataron de partidos. Tal horror concibieron del esfuerzo del ecijano D. Francisco Manuel, que supo morir como caballero emulando en sus hechos a los antiguos y dando ejemplo con su memoria a los presentes y futuros.
El citado capitán ecijano, fue nombrado caballero de la Orden de San Juan en 11 de marzo de 1611, recogiéndose por dicha Orden: Que murió en la jornada del Brasil, peleando con grande valor. Aprovechamos igualmente, para terminar este artículo biográfico, el testimonio que nos dejó Florindo sobre el anterior capitán ecijano, para recoger lo que, tras la muerte de aquel, hizo su hermano, también reconocido militar, Don Luis de Aguilar y Medina, escribiendo:
Sintió D. Luis de Aguilar y de Medina la muerte de tal hermano y con ánimo de vengarla quisiera ocupar el puesto, aunque de tanto riesgo; más rendida la ciudad volviose la armada a Cádiz, y su galeón, habiéndose derrotado llegó a tiempo que la armada inglesa entró en la batalla con ciento veinte bajeles. Tuvo orden D. Fernando Girón, caballero del hábito de S. Juan y del Consejo de Estado, a cuyo cargo estaba la Isla, para impedir, embarcándose, la entrada del inglés; no lo hizo por parecerle a don Fernando Girón eran desiguales las fuerzas, ordenole la guarda de nuestra armada, porque el enemigo no la quemase aquella noche. Más había echado en tierra catorce mil soldados, convino asistiese a Cádiz con su compañía. Hízole al fin, haciendo rostro a tan grande dificultad como era estar el inglés en la Isla. Advirtiéndoselo el corregidor de Jerez en la Puente de Zuazo, con decirle, que llevaba su gente al degolladero, él respondió, que tenía orden para hacerlo y que sería el primero en acometer el peligro y el último en dejarlo. Marchó con trescientos infantes, la bandera tendida y no saliendo de su paso; llegó sin pérdida alguna, donde fue de mucha importancia, saliendo cada día a las escaramuzas y encuentros, hasta hacer embarcar al enemigo, no menos destrozado que temeroso. Sirvió después con su compañía en la armada real dos años; pasó a la corte a pretender que su Majestad le ocupase en su servicio, en ocasión que llegó la nueva de la pérdida de la flota de Nueva España. Ofreciose entonces don Luis de Aguilar y Medina para servir con una pica donde le ordenasen, por ser tiempo entonces que los caballeros trataban de servir antes que de pedir. Acción, que siendo de estima a su Majestad, le hizo merced que levantase una compañía en esta Ciudad, con la cual sirve hoy en la armada que fue a las Indias, donde es cierto habrá mostrado quién es, como en todas las ocasiones ha hecho.
Lo siento no hay comentarios todavía, pero puedes ser el primero en comentar este artículo.
Escribe un comentario