Écija – El Portal Temático Cultural

Mayo de 2014
Ramón Freire Gálvez.

Ramón Freire

Eran los años 1960, cuando estudiábamos en el Instituto Laboral Luis Vélez de Guevara. Uno de nuestros compañeros y amigo, era el joven Fernando Rodríguez Martín, buen estudiante e inteligente.

A mi hermano Joaquín y a mi nos gustaba jugar al billar; para ello, deseábamos ir al Casino de Artesanos, donde, por ser mi tío Antonio socio, nos permitían, cuando se quedaban las mesas libres, practicar el juego del billar.

En Écija, además del de la calle Cintería (más pequeño), había unos salones en la calle Miguel de Cervantes, en los bajos del edificio donde hoy está situado, entre otros, el Banco de Andalucía, del que era dueño Manrique y encargado del local D. José Rodríguez González, militar retirado, y donde también se practicaba el juego del billar, además de las correspondientes partidas de futbolines, ocurriendo en ocasiones tener que esperar más de una hora para poder coger una mesa de billar libre.

El problema radicaba y dependía de la persona o personas con las que jugara frente. Me explico. En el billar te toca tirar (hablando coloquialmente) cuando el contrario falla la carambola que, entre nosotros, era con mucha frecuencia, pero había un joven de la misma edad que nosotros, compañero del Instituto, que era único cuando jugabas frente a él y le tocaba turno, porque de ser la partida a 30 carambolas (lo más frecuente entre nosotros), había partidas que por culpa de la habilidad de dicho joven, no jugaba uno más de dos veces y como la partida la pagaba el que perdía, pues ya puede usted querido lector imaginar el resultado: pagar y no jugar.

Con el paso del tiempo dicho joven, se hizo adolescente y cursó sus estudios de derecho en la Universidad de Sevilla, de la que salió brillantemente Licenciado, especializándose en fiscal y administrativo, teniendo yo la suerte posteriormente de compartir con él algunas labores profesionales, pues incluso llegó a ostentar el cargo de Juez de Instrucción Sustituto y hoy dirige un gran centro empresarial en nuestra propia Ciudad.

Haciendo ahora un pequeño paréntesis en lo que pienso biografiar, acudiendo a la amplia enciclopedia existente, sabemos que el billar es un deporte de precisión que se practica impulsando con un taco un número variable de bolas (antiguamente de marfil), en una mesa con tablero de pizarra forrada de paño, rodeada de bandas de material elástico y con troneras o sin ellas. Tuvo la carta olímpica para los Juegos Olímpicos de 2004, aunque no llegó a ser incluido en ellos y existen muy diferentes variantes.

Los inicios del billar se remontan a culturas tan antiguas como Grecia y Egipto, pero es en la Europa del siglo XV cuando empieza a tomar la forma del juego que se conoce en la actualidad. El nombre al parecer proviene de la palabra francesa bille, traducido por bola. Existen dos teorías sobre su creación, la escuela francesa afirma que el juego fue creado por Henry Devigne, un artesano de la corte de Luis XV, mientras que la tradición inglesa asegura que su legítimo inventor fue Bill Yar. En 1825 se celebró el primer campeonato oficial de billar en el Reino Unido, y en 1835 el galo Gaspar Guatave de Coriolis escribe “Teoría matemática del juego de billar” obra que permite el descubrimiento de las trayectorias parabólicas por ataque no horizontal.

Entremos ahora de lleno en la vida de este ecijano que, a través del billar, ha extendido el nombre de la Ciudad que le vio nacer más allá de nuestras fronteras y que, en dicho deporte llamado minoritario, es desconocido para la mayoría de sus paisanos.

FERNANDO RODRÍGUEZ MARTÍN, nació en Écija a las trece horas del día 18 de Agosto de 1.951, en la calle Merinos nº 25, hijo de José Rodríguez González y de María del Valle Martín Fernández; nieto por línea paterna de José Rodríguez Martín y de Francisca González Osuna y por línea materna de José Martín Paredes y de Soledad Fernández Lobato.

Y lo que ustedes podrán disfrutar a continuación, dado los numerosos campeonatos que ha conseguido y que representa todo un orgullo, no sólo para el personaje, sino para nosotros sus amigos y paisanos, es el amplio currículum en el juego del billar, hasta el día de hoy, pues además de entrenar casi dos horas diarias, participa casi de forma semanal en los numerosos campeonatos oficiales que se celebran (En la imagen, participando en prueba puntuable ranking de España de billar a tres bandas. Madrid, año 2.004).

Aunque desde muy joven no ha dejado de practicar el billar, lo cierto es que solo desde hace unos quince años, concretamente a partir del año 1999 es cuando comienza a participar en competiciones y en este periodo de tiempo es cuando ha conseguido todos los títulos y

campeonatos que posee, que, en la actualidad, suman catorce Campeonatos Absolutos de Andalucía y once Subcampeonatos, aparte de numerosos trofeos conseguidos en competiciones no oficiales, pero de gran prestigio.

Tanto los campeonatos como los subcampeonatos han sido conseguidos en las diversas modalidades de que consta el billar, ya que es un jugador que, como se dice, utilizando un símil flamenco, “toca todos los palos”; así posee ocho campeonatos y tres subcampeonatos absolutos en la modalidad de “billar a la banda”, tres campeonatos y dos subcampeonatos en el “billar al cuadro 47/2 y 71/2”, dos campeonatos y dos subcampeonatos al “billar libre”, todo a título individual; también ha sido campeón de Andalucía de billar a tres bandas, con el equipo en el que habitualmente compite en liga “Club de Billar Sevilla”, además de haber quedado cuatro veces subcampeón de Andalucía con la Selección Provincial de Sevilla y dos veces tercero en el Campeonato Absoluto Individual de billar a tres bandas.

Todos los anteriores son los logros conseguidos a nivel oficial en Andalucía. Igualmente ha conseguido importantes torneos de carácter no oficial pero de gran prestigio, como el Torneo del Turista, que se celebra todos los años en agosto en Fuengirola (Málaga), al que asisten importantes jugadores de billar, no solo andaluces sino también del resto de España y extranjeros; así como otros en Alcalá de Guadaira, Granada, Ronda, Écija, Sevilla, etc. (Aquí

podemos ver a Fernando Rodríguez con Antonio Barroso (presidente F.A.B.) año 2.010 recibiendo entrega trofeo y diploma de Campeón de Andalucía, modalidad Banda).

Por otra parte, compite en la liga andaluza en la máxima categoría (división de honor) en el equipo de Sevilla, con el que también interviene en la primera división de la liga nacional española, compitiendo con los equipos de las principales capitales y ciudades españolas, habiendo conseguido importantes triunfos con este equipo.

A nivel individual participa en todas las pruebas de ranking andaluz de billar a tres bandas, donde normalmente está situado entre los diez mejores jugadores.

En el ranking nacional de billar a tres bandas, participa en pocas pruebas debido a motivos de trabajo, ya que su profesión no le permite ausentarse todo el tiempo que la asistencia a tales torneos requiere; no obstante ha tenido participaciones puntuales, con muy buenos resultados, como ha sido el de su participación varios años, en el Torneo Príncipe de Asturias que se celebra en Gijón, puntuable para el campeonato de España e igualmente en Madrid, Barcelona, Valencia, Murcia, etc.

Asimismo ha participado, en dos ocasiones, en pruebas puntuables para la Copa del Mundo de billar a tres bandas, destacando la celebrada en Sevilla en el año 2004, a la que concurrieron los 118 mejores jugadores del ranking mundial y 2 invitados, uno de los cuales era el ecijano Fernando Rodríguez, el cual, ante la sorpresa general, eliminó a 5 de los participantes, entre ellos al importante jugador japonés nº 40 del ranking en esa fecha, Takesima, cayendo nuestro paisano ante el portugués Vieira (subcampeón mundial), ocupando, al final del torneo, un dignísimo puesto número 49 (En la imagen podemos ver a Fernando durante su participación en el Trofeo Príncipe de Asturias. Gijón, año 2.003, prueba del ranking de España de billar a tres bandas…

Actualmente participa en la liga andaluza con el equipo “Club de Billar Casino Artesanos de Écija”, equipo muy conocido y querido en todo el universo billarístico, sede recreativa que dispone de una sala de billar que constituye una de las instalaciones mas coquetas y bonitas de las existentes en toda España, cuyo club es un foro de billar de gran importancia dentro del billar andaluz y español, habiéndose celebrado en sus dependencias, campeonatos de Andalucía en todas sus modalidades e incluso una prueba de ranking puntuable para el campeonato de España de billar a tres bandas en el año 2002 y un Campeonato Absoluto de España de billar artístico en el año 2013.

No obstante la prueba mas importante y querida por todos los billaristas es la conocida como “Master de Andalucía de Billar a tres bandas” (Torneo de Maestros), que se celebra todos los años en nuestra Ciudad de Écija, en las dependencias del citado Casino Artesanos, durante la primera quincena del mes de diciembre, gozando la misma de un enorme prestigio (En la

fotografía, Fernando Rodríguez, con el trofeo de campeón, con Antonio Barroso (presidente de la F.A.B., en el centro) y el segundo clasificado en el Campeonato Absoluto de Andalucía de billar libre, celebrado en Écija en el año 2.010).

Quien conozca el deporte del billar, sabe que es un deporte, aunque minoritario, un deporte insisto de muchas horas de entrenamiento y en el caso de nuestro personaje, tienen sus éxitos mucho más mérito, pues al no poder dedicarse profesionalmente a ello por razones de su propio trabajo, sus largas horas semanales de entrenos, es lo que le hacen estar en forma constante y mejorando su nivel.

La fotografía que cierra este artículo biográfico, corresponde a la sala de billar que Fernando tiene en su casa, donde le vemos junto a la mesa, portando uno de sus tacos preferidos y, sobre aquella, los numerosos trofeos y diplomas que jalonan, hasta ahora, para orgullo de él y de la propia Écija, su carrera billarística, con numerosos trofeos y premios conseguidos en los distintos campeonatos donde ha participado.

Yo, con este pequeño artículo, solo he pretendido, como he hecho y sigo haciendo respecto de otros ecijanos, dar a conocer a aquellos conciudadanos, que por uno u otro motivo, han llevado el nombre de nuestra Ciudad más allá de nuestras murallas.

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