Écija – El Portal Temático Cultural

No soy brujo ni adivino, sino lógico. Ando en los últimos artículos rescatando letras del pasado, porque resulta que coinciden con el presente, a pesar de que las escribí hace años. Estas que siguen, por ejemplo, cumplirán ahora tres años y las titulé “La Esperanza de Monstesquieu”. Entre otras cosas, decían lo siguiente:

“Creo que Pedro Sánchez es un mentiroso empedernido (quizá por eso me saca de mis casillas). Lo he observado mintiendo tan descaradamente para acabar echando el conejo al zurrón, que lo considero el rey del embuste y el birlibirloque. Aunque, de otra forma ¿cómo habría podido investirse Presidente de una Democracia Constitucional con el apoyo de los antisistemas, independentistas y anticonstitucionalistas de los pueblos de España? Hay que ser muy trolero para quedarse con los mayores troleros del país.

“Todos sabemos que, aunque ERC, BILDU, la CUP y algunos más, sean reconocidos por nuestra Constitución, es gente que no cree en nuestra Democracia y, por tanto, tampoco en sus principios ni en sus poderes.

“Fue Montesquieu quien expuso que un hombre, cuando tiene algún poder, puede intentar abusar de él y, por eso -en Democracia- hace falta disponer de un Sistema para que el propio Poder se autoproteja y ponga límites a su abuso. Para ello, ya en 1748, en su obra “El Espíritu de las Leyes”, propuso la separación de los tres poderes del Estado (Legislativo, Ejecutivo y Judicial), a fin de que fueran ejercidos por órganos distintos -autónomos e independientes entre sí-, confiando la vigilancia de los unos sobre los otros, a base de un obligado control mutuo, por si fuera necesario detener los excesos o el intento de prevalencia de cualquiera de ellos sobre los demás.  Realmente esta es la única fórmula para garantizar -en Democracia- los abusos de poder.

“Por eso no es de extrañar que sean los antisistemas los que apoyen los delirios de grandeza de Pedro Sánchez exigiéndole -una y otra vez- que, como Poder Ejecutivo, se inmiscuya a través del Legislativo, en las decisiones del Judicial. Cosa de esperar viniendo de partidos sin visión de Estado y enemigos del Estado de Derecho, que ni siquiera han leído a Monstesquieu.”

Cuando escribía estas letras, aún confiaba en que, a pesar de las exigencias de comunistas, independentistas y antisistema, Pedro Sánchez respetaría la necesidad de este equilibrio entre poderes -recogido en nuestra Constitución- que impide la implantación de cualquier ambición personal o sectaria. Además, también existen unas líneas que dicta la Justicia y la Razón, y que nunca deberían de ser traspasadas. Pero es que Pedro Sánchez, con sus últimas decisiones, está machacando todas esas líneas y violentando todas esas necesarias garantías de nuestro Estado de Derecho, hasta el punto de cambiar la Ley para adaptarla exclusivamente a los intereses de los que lo apoyan: una privilegiada clase de criminales, ladrones y fulleros.

Me produce una enorme tristeza, pero la realidad -y a los hechos me remito- es que el PSOE de Pedro Sánchez está enterrando bocabajo a Montesquieu.

by