CIEGO PERO CON SENTIMIENTOS por Ángela Soldán Camúñez (alumna 1º de Bachillerato)
De los errores se aprende
A día de hoy podemos decir que hay personas que cometen errores, pero se podría decir que la mayoría de las veces los errores son tan grandes que se duda si pedir perdón, aunque nunca es tarde para hacerlo. De hecho, en la vida hay un tiempo para todo: para nacer, contemplar lo que nos rodea, para llorar, para sonreír y, sobre todo, para caernos y volvernos a levantar, ya que lo importante es que no nos adelantemos ni queramos vivir los momentos en los cuales la vida te va marcando su propio ritmo. Nosotros somos los encargados de considerar los problemas como una parte inevitable de la vida ya que si no tienes problemas a lo largo de tu vida, déjame decirte que tú no tienes una vida ya que tienes que dejarte llevar por los pensamientos, pero no hacerte esclavo de ellos.
Tienes que ser consciente de tu paso en esta vida, porque al fin y al cabo la definición sobre ti no es de lo que tú haces, sino de la forma en la que te levantas después de caer en los errores. La mayor reflexión que he podido hacer es que no esperes al día de mañana para cambiar tras tus errores, ya que el mañana es hoy, y si hoy no haces nada… mañana también seguirás haciendo nada.
Escribiendo esto y dándole mil vueltas a todo, he llegado a la conclusión de que la vida es como un juego de cartas, te pueden tocar cartas buenas y cartas malas. La mayoría de las veces no tienes las cartas que te hubiese gustado tener, pero lo que importa no es cuántas cartas tengas ni tener las cartas más buenas, sino saber jugar bien esas cartas ya que de esas cartas va tu vida.
Ángela Soldán Camúñez
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