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A VUELTAS CON EL HEMBRISMO (I) por Francisco J. Fernández-Pro

A VUELTAS CON EL HEMBRISMO (I) por Francisco J. Fernández-Pro
diciembre 05
16:33 2015

 

Francisco J. Fernández-Pro

Francisco J. Fernández-Pro

Comienzo este artículo reconociendo que, desde hace muchísimo tiempo, lo que venimos a llamar lo “políticamente correcto”, me trae al pairo… La cosa está clara: me di cuenta de que si quieres servir a la verdad, resulta absolutamente imposible estar a bien con todo el mundo; así que prefiero estar bien conmigo mismo y con los que -por encima de cualquier interés particular- defienden la Razón y la Justicia, que condescender con todos para parecer amable, tragándome sapos y ruedas de molinos.

Dicho esto, confieso que me emocionó –por justo, razonable y coherente- el comentario Eva First realizó a mi último artículo. Hay que conocerla para comprender lo que digo. Tras este seudónimo, escribe una mujer que en Sevilla, durante años, mantuvo en jaque a un montón de gente, movilizando a las asociaciones vecinales, participando en todos los saraos y siendo un quebradero de cabeza para los concejales del Ayuntamiento, los Delegados y Consejeros de la Junta y hasta para los dirigentes de su partido, cuando se desviaban la senda correcta o abusaban de sus competencias. Para rizar el rizo de la coherencia, como buena ecologista compró un terrenito en el campo y allí se fue a vivir entre perros, gatos, gallinas, un par de caballos, un mulo,… Todo ello, claro está, porque cuenta con el apoyo absoluto de su compañero: un auténtico señor que, no sólo la respaldó en todo lo que emprendió, sino que es también un activista de primera línea, incluso con más años de experiencia que ella en esta lucha de quijotes (Pepe inició sus movidas en pleno Franquismo, siendo uno de los colaboradores más estrechos de Alejandro Rojas Marcos en su primera aventura política, cuando se presentó por el Tercio Familiar al Ayuntamiento de Sevilla y fue desterrado a Écija después de sus primeras intervenciones. También fue uno de los primeros miembros fundadores de ASA y del PSA) Pues bien, todo lo expuesto, para que se comprenda mi reacción ante su comentario: porque es a este tipo de personas a las que yo tengo como verdaderas feministas (las otras, son sólo “hembristas)

Eva First comenta en mi artículo: Más les valdría preocuparse del contenido de los mensajes que de no herir la sensibilidad del sexo femenino; particularmente pienso que la mujer que se siente vulnerada por el idioma castellano tal cual demuestra ser una inculta integral, aparte de que este tipo de cosas en lugar de llegar a la igualdad nos llevan directas a la discriminación. Ahora bien esa separación es políticamente correcta y sobre todo alarga los discursos de los políticos convenientemente para que sin decir nada estén hablando el mayor tiempo posible, que al final es de lo que se trata.”

Pero además de Eva First, fueron varias amigas las que me hablaron de este artículo. Una de ellas, que trabaja en nuestro Ayuntamiento, me confesaba que aunque estaba de acuerdo conmigo, los políticos la obligaban a utilizar en cualquier documento el que llaman “lenguaje no sexista”, como si el lenguaje tuviera sexo (por cierto, a esta amiga le recordé que fui yo quien en su día –y en calidad de portavoz del Grupo Andalucista- sugirió, a finales de los ochenta o comienzo de los noventa del pasado siglo, que en los impresos oficiales y documentos del Ayuntamiento, constara “discapacitado” en lugar de “minusválido” y “mujer” en vez de “hembra”)

Por otro lado, mi hija Clara, que estudia para Maestra (siempre me gustó más este término antiguo que su eufemismo), ante mi sorpresa me informa que, aunque en la Facultad hay división de opiniones entre los profesores, algunos de ellos adoctrinan a los alumnos con el objetivo de acabar con el neutro y machacar los sustantivos, otorgándoles su calidad de género, no a partir de los artículos correspondientes, sino del engendro de un nuevo sustantivo femenino; lo que, en correspondencia,  nos obligaría –cuando fuera masculino- a añadirle la terminación “-o” (es decir, el término “jefa”, se correspondería con “jefo”; el de “presidenta”, con el de “presidento”; “dentista”, con “dentisto” y “taxista”, con “taxisto”… y así, todo igual, hasta el infinito de lo absurdo)

Más a estos atentados a las normas lingüísticas que, como cruzada de la lucha hembrista, están demostrando la falta de capacidad intelectual de tanta gente y va camino de convertir a nuestros jóvenes en verdaderos zoquetes, hemos de sumarle algo de mucha mayor gravedad: sus desvaríos respecto a las Leyes.

Hace bastantes artículos que escribí sobre esta cuestión, indignado por las actuaciones preventivas que se habían aplicado a un concejal de nuestro Ayuntamiento y que lo condenó al escarnio público y una noche en los calabozos de comisaría, por una denuncia de malos tratos que, al final, resultó ser falsa. Sin embargo, me parece que es hora de volver sobre el asunto que, aunque políticamente incorrecto, en justicia me parece fundamental para la defensa de la Razón más elemental.

Por tanto y, para no cansar demasiado, seguiremos en el siguiente capítulo…

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6 Comentarios

  1. Luis Candelas
    Luis Candelas diciembre 06, 10:01

    En EEUU han aprobado que la mujer en el ejército ocupe también la primera linea de combate, como exigían las feministas. Y creo que esto es así porque aunque el hombre, por la inercia de la tradición al principio se resistiera a que la mujer se metiera en sus cosas que les gustan (la pelea organizada culturalmente, o sea en la guerra) al final comprendió que era un regalo lo que las mujeres, en el marco de una sociedad industrial donde la fuerza pasó del hombre a la máquina, le ofrecían: ser como los hombres, iguales, con la creencia de que así se recuperaba el equilibrio perdido con el enorme desarrollo adquirido por la guerra industrial (patente sobre todo a partir de la llamada I Guerra Mundial). Pero eso de buscar el equilibrio sólo en el derecho, en la práctica se ha demostrado que es un error y no hay más que echar mano de las estadísticas de violencia contra la mujer por parte de los hombres para que ver que está mucho más desarrollada en las sociedades más “igualitarias”, como por ejemplo en los países nórdicos de Europa. Creo que muchas activistas lo han planteado mal cuando el mundo, por otro lado, a nivel de ciencia, está más preparado que nunca para recuperar con fuerza los valores que aporta la femineidad, los valores de la vida, absolutamente necesarios para salvar al planeta tierra del desastre inducido por los hombres y su progreso industrial infinito. Pero evidentemente, a pesar de los paripés oficiales de la lucha contra el cambio climático, no creo que haya, por parte de los Estados, ningún interés en alejar el Apocalipsis. Para ello haría falta darle tanta consideración a la entrada en la vida (el nacimiento, en el que son especialistas las mujeres) como a la muerte (especialidad de los guerreros desde siempre).

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    • Paco Fernández-Pro
      Paco Fernández-Pro diciembre 07, 01:21

      Estimado Amigo y Maestro, como siempre, aportando datos y sabiduría a estos artículos. Muchísimas gracias por eso… Espero que te guste la segunda parte.
      Un abrazo.

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  2. JUBILADO
    JUBILADO diciembre 08, 16:54

    Estimado D. Francisco; Admitiendo que la biología o la evolución nos capacita a unos más que a otras para determinadas funciones, y viceversa, también es cierto que en una sociedad justa e igualitaria, no se debe poner impedimentos a ninguna persona por la razón que sea.
    En nuestro Ejercito, hace años que se eliminaron todas las limitaciones en ese sentido y como ejemplo le pongo el siguiente; en las exigentes unidades de operaciones especiales (boinas verdes) cualquier mujer tiene abiertas las puertas para ingresar en tan selecto grupo. Créame que se de lo que hablo cuando le digo que estas unidades son de las mas valoradas del mundo. Comparadas y superando a los SEAL,s norteamericanos poor su dureza y nivel de exigencia. Pues bien, entre sus miembros han conseguido ingresar, honrosamente, una teniente, una sargento y cuatro de tropa, que demuestran su valía diariamente, en misiones que por su carácter reservado, ni siquiera son reconocidas.
    Saludos.

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    • Paco Fernández-Pro
      Paco Fernández-Pro diciembre 09, 02:37

      Estimado JUBILADO: Estoy absolutamente de acuerdo con usted y, no sólo eso, sino que gran parte de mi artículo lo dedico a elogiar a una amiga activista que ha sabido dar leña por un tubo a un montón de ineptos “machotes”.
      Ademmás, conozco personalmente a mujeres militares y policías (incluso amigas), que son verdaderos ejemplos de efectividad… pero esta primera parte de este artículo, va por otros derroteros: yo hablo de los atentados al lenguaje, porque cuando le pregunté a mi amiga Beatriz, cómo la llamaban sus soldados; ella me respondió, inteligentemente: “Por supuesto, Teniente Tamarit”
      En cuanto a lo demás… La segunda parte ya está enviada, espero que pronto se publique. En ella explico las razones de este artículo y creo que, una vez leída, observará, claramente, nuestras coincidencias.
      Un saludo muy cordial desde sus torres.

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  3. Eva First
    Eva First diciembre 09, 15:08

    Gracias, amigo Paco por el inmerecido honor de casi protagonizar este articulo. Como sabes eso del protagonismo esta muy lejos de mi forma de ser, pero a pesar de ello no sé cómo me las apaño para serlo en todos los ámbitos en los que entro, ganándome así las envidias, los celos y las críticas de mucha gente, muchas veces pienso “calaíta que estás más guapa”, pero no hay forma, si no me meto me meten, ahora eso sí, todo merece la pena si se van “coleccionando” amigos como tú y tu familia y otros que ambos conocemos. Es magnifico recibir tus cartas y tus noticias de vez en cuando, y series mucho mejor vernos más a menudo, per ya sabes, las circunstancias mandan.

    Y para no irme de vacío te dejo ahí otro reto, otro tema que también merece un debate, la llamada violencia de género, y sobre todo lo último de lo ultimo, esa diferencia que se han sacado de la manga los políticos entre el asesinato de la mujer por parte del hombre, llamado violencia de género y el del hombre por parte de la mujer, que no merece ese nombre, sino el de violencia doméstica, no se basándose en que, imagino que para no hacerlos equivaler, metiendo en el mismo saco a los “hombres asesino” que a las pobrecitas victimas, las mujeres que solo matan por defenderse. Nada más lejos de la realidad que muchos conocemos, hoy por hoy hay montones de hombres acosados y llevados hasta al suicidio por sus parejas y no salen en las noticias, yo misma conozco varios casos, aparte de las estadísticas recogidas por nuestro común amigo Diego de los Santos en su libro ” Las mujeres que no amaban a los hombres.
    A ver si de una vez se comienza a hablar de este tema que ya lleva años sucediendo..
    Como siempre un gran beso para todos

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    • Paco Fernández-Pro
      Paco Fernández-Pro diciembre 10, 11:15

      Querida Amiga, si eres una parte consustancial de este artículo, sencillamente es por lo que digo en él: tu coherencia. Me encontré con todo tipo de pelaje entre la gente que he conocido durante más de treinta años de vida pública -tanto en la Política, como en la Academia y en la vida- y te aseguro que, por eso, sólo acabé admirando a los que, con el tiempo, supieron demostrarme su coherencia (que, personamente, considero -junto a la Bondad- una de las virtudes fybdanebtakes en el ser humano) Por tanto, no te extrañe mi comentario sobre ti: ya sabes que te admiro por esa coherencia que siempre has demostrado.
      En cuanto a vernos, ojalá sea pronto; y, en cuanto a tu propuesta, te remito a la segunda parte de este artículo.
      Un beso.

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