El caso del Palacio de Peñaflor continúa en
el juzgado, pendiente de declaraciones para su resolución.
La
causa incoada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción
número dos de Écija , en torno a las polémicas
obras de rehabilitación promovidas por el Ayuntamiento
astigitano en el palacio de Peñaflor, construido entre
1700 y 1775 y declarado Bien de Interés Cultural (BIC),
está pendiente aún de que preste declaración
como imputado Antonio L.T., quien fuera gerente de la empresa
adjudicatarias de estas obras en cuestión.
Fernando Osuna, el abogado que representa al Grupo andalucista
del Ayuntamiento de Écija en estas diligencias, ha
informado a Europa Press de que ha trascendido que Antonio
L.T. ocupa un acta de concejal por el PP en el Ayuntamiento
de Lobras (Granada), extremo que de hecho figura en la propia
página web de este consistorio alpujarreño.
Tal información, según Osuna, ha sido trasladada
al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número
dos de Écija, al objeto de que promueva las "gestiones"
necesarias para que sea nuevamente llamado a declarar.
Antonio L.T., en ese sentido, ya fue llamado a declarar por
esta causa por un juzgado de Roquetas de Mar (Almería),
dado que las diligencias le localizaban en este municipio
costero.
CAUSA
DESPERTADA POR UN PARTICULAR
La causa parte de la denuncia formulada hace unos años
por un ciudadano, a título particular, a cuenta de
la situación del palacio de Peñaflor, propiedad
del Ayuntamiento de Écija. En 2004, el monumento fue
objeto de un concurso público promovido por el Ayuntamiento
y orientado a su rehabilitación y transformación
en un hotel de cuatro estrellas y 58 habitaciones.
Tras quedar desierto el concurso público, las obras
fueron finalmente encargadas a 'Viturse S.L.' en un procedimiento
negociado sin publicidad. En 2006, de cualquier forma, el
Ayuntamiento de Écija entregó la correspondiente
licencia de obra a la empresa adjudicataria de los trabajos,
si bien la adjudicataria no abonó las tasas municipales
y, en febrero de 2007, una inspección habría
descubierto que la empresa había comenzado una serie
de sondeos en el interior del monumento sin haber cumplido
el mencionado y obligado pago. En abril de 2008, finalmente,
el por entonces Gobierno municipal de Juan Wic (PSOE) resolvió
el contrato dados los "incumplimientos" de la constructora
adjudicataria.
INFORME
REVELADOR
Entretanto, la Real Academia de Ciencias, Bellas Artes y Buenas
Letras 'Luis Vélez de Guevara', radicada en Écija,
había emitido de su lado un informe en el que resuelve
que las obras acometidas por 'Viturse S.L.' no corresponden
a un edificio protegido por sus "agresivas" y "dudosas"
actuaciones, deduciendo así que la intervención
carecía de "proyecto de conservación"
y supuso el incumplimiento de las leyes nacional y andaluza
de patrimonio histórico.
El informe en cuestión, recogido por Europa Press,
censura las "demoliciones parciales", el "dudoso"
alzado de solerías, la "eliminación sin
control de los papeles pintados" pese a remontarse algunos
al siglo XIX, o el desmantelamiento "agresivo" de
las chimeneas francesas de mármol. A tal efecto, esta
institución advertía del supuesto incumplimiento
de "un buen número de directrices y preceptos"
de la Ley nacional de Patrimonio Histórico y la normativa
autonómica en vigor desde 2007 para esta misma materia.
El Grupo andalucista, por su parte, había pedido al
Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número
dos que fuese investigada la supuesta "desaparición"
de obras de arte antaño contenidas en el palacio precisamente
durante todo este periodo de tiempo.