El director gerente del Hospital municipal de Écija,
Manuel Romero, ha pedido a los grupos políticos de la
oposición PSOE e IU-LV que dejen al hospital de
Écija al margen de la batalla política y de campañas
electorales prematuras, porque hacer lo contrario puede resultar
peligroso porque con la salud no se juega.
En respuesta a las críticas de estas dos formaciones
políticas que han lanzado datos falsos sobre la
situación financiera del Hospital, Manuel Romero
aseguró que la deuda del centro hospitalario no
es alarmante, sino la normal de cualquier centro sanitario que
pone en marcha muchos nuevos servicios que hacen falta en la
población a la que damos cobertura.
Romero indicó que son absolutamente falsos
los datos que dan PSOE e IU-LV sobre una supuesta deuda de más
de 6 millones de euros (1.000 millones de pesetas). Romero afirmó
que la deuda acumulada del centro es de 2.700.000 euros
(unos 450 millones de pesetas) y esta ha sido provocada por
el aumento de servicios médicos.
En este sentido el gerente del Hospital recordó que
en 1995 el centro sanitario astigitano tenía sólo
6 especialidades más las urgencias y en 2002 tiene 18
especialidades, además de mejores servicios de urgencias.
Igualmente Romero recordó que en 1995 cuando en Écija
gobernaba el PSOE el Hospital tenía una plantilla de
35 facultativos que hoy son 57, 57 empleados de personal sanitario
que han pasado ahora a 87 y 39 operarios de personal no sanitario
que hoy son 56.
En este tiempo hemos mejorado la calidad y ampliado servicios
y la deuda es sostenible. Así Manuel Romero dijo
que si PSOE e IU-LV están preocupados y alarmados
por la deuda que nos digan claro y alto qué servicios
dejamos de prestar a los ecijanos y si lo hacemos con las urgencias
pediátricas, la medicina interna, la traumatología,
la ginecología, la osteoporosis, la prevención
del cáncer de mama, los partos con anestesia epidural,
la otorrinolaringología, la cirugía, los quirófanos
o cualquier otro servicio de los que prestamos. Que nos digan
cuales quitamos, dijo.
Romero consideró insólito lo que sucede
en Écija porque en ningún caso se hace del tema
de la salud una guerra política y aquí parece
que todo vale porque las elecciones están próximas