Salud detectó
el riesgo en octubre y avisó al hospital.
Salud expedienta al hospital. La dirección
del centro sanitario San Sebastián de Écija, propiedad
del ayuntamiento, no reparó a tiempo las deficiencias
en su sistema de calderas, tal como explica la Delegación
Provincial de Salud y reconoce el mismo gerente del hospital,
Manuel Romero.
En octubre de 2002 la inspección sanitaria detectó
fallos en el sistema que debería mantener el agua de
las instalaciones a más de 50 grados para prevenir la
aparición de la legionella. Sin embargo, el centro no
adoptó las medidas pertinentes por lo que Salud ha abierto
un expediente al hospital tras la muerte por esta enfermedad
de un paciente de 77 años, Antonio CV., que tuvo que
ser trasladado al hospital de Osuna, donde murió el día
13. La caldera ha resultado ser el foco de la enfermedad.
Tras este fallecimiento, otros 12 pacientes -según la
Delegación Provincial de Salud- tuvieron que ser trasladados
al hospital de La Merced de Osuna, ya que todos ellos presentan
alto riesgo de contraer la dolencia, explicó el gerente
del centro sanitario astigitano.
Los pacientes continúan allí sin que las autoridades
sanitarias informen de su estado, limitándose a confirmar,
de forma escueta que no padecen legionella. Tampoco aclaran
si se les trasladó a todos juntos ni si el contingente
entero fue conducido en ambulancia a Osuna anteayer o algún
enfermo aislado lo fue en otra fecha e incluso ayer mismo, ya
que en el centro ursaonense sólo constaban cinco ingresos
la tarde del día 22. Al mismo tiempo, y sin que haya
sido necesario cerrar ninguna de las dos plantas afectadas en
el San Sebastián, ayer se efectuó un tratamiento
de choque con doro desarrollado para desinfectar la red de conducciones
del agua del hospital.
También se cortó el suministro en la primera
y segunda plan tas y. se distribuyó agua embotellada,
comunicó el gerente del recinto. Además del traslado
de los pacientes, el centro no admitirá el ingreso de
enfermos con afecciones respiratorias e inmunodeprimidos -los
grupos de riesgo- mientras se toman las medidas de control del
foco infeccioso. "La situación está bajo
control", indicó Romero.
En referencia a los defectos de la caldera, el gerente del
hospital expuso ayer que se "acaba de finalizar un proyecto
técnico y que se ha solicitado presupuesto "para
una instalación de esas características y los
costes de obra". Está previsto, dijo, que el trabajo
comience "la semana próxima' para "cumplirla
petición de Salud".
Esta misma mañana se reúne la junta plenaria
del centro sanitario, que informará a los partidos políticos
sobre el caso de legionella y los traslados de enfermos.
La decisión de abrir un expediente se ha tomado "dado
que las recomendaciones para subsanar deficiencias en las instalaciones,
derivadas de distintos informes de inspecciones técnicas
realizadas por la Delegación Provincial de Salud en el
hospital San Sebastián no se habían llevado a
cabo". Sin embargo, ese departamento no contestó
qué consecuencias puede tener el expediente: si una mera
sanción económica o algo más severo.
Desde el sindicato de enfermería Satse, su secretario
andaluz, Francisco Muñoz, explicó que la peor
noticia para el hospital sería la retirada del concierto
con el Servido Andaluz de Salud (SAS), lo que, además,
redundaría en el empobrecimiento de la atención
sanitaria para los ecijanos. Fuentes de Salud desconocían
ayer qué sanción puede corresponder a este incidente.
El hospital estuvo a punto de perder 36.000 euros de este concierto
hace pocos meses, debido al impago de una indemnización
por negligencia médica.
Además, la ex directora del colindante centro de residencia
asistida municipal, María José García,
comentó que los ancianos de este geriátrico utilizaban
agua proveniente de la misma caldera que el hospital. La población
anciana, dada su facilidad para contraer afecciones respiratorias,
es muy sensible a la bacteria de la legionella. El actual director
del asilo, Francisco José Rodríguez, rehusó
aclarar si esa caldera sigue siendo utilizada conjuntamente
con el hospital. Por su parte, el gerente del centro sanitario
se limitó a dar explicaciones en un comunicado en el
que omite cualquier referencia sobre dicha caldera común,
pero en el que pide a los partidos políticos de Écija
"un ejercicio de responsabilidad" para no alarmar
ala población "innecesariamente".
Por contra, la oposición municipal atacó ayer
duramente al equipo de gobierno: "guardan silencio para
que este incidente pase desapercibido", declaró
el portavoz del partido independiente UAPI, José Miguel
Fernández Zorrilla. "Sólo el gerente habla,
pero tras trascender el caso en los medios de comunicación".
En similares términos habló el portavoz de IU,
Salvador Bustamante, que criticó que nadie del hospital
informara del fallecimiento de Antonio C.V.
Este periódico intentó ayer en reiteradas ocasiones
ponerse en contacto con el alcalde de Écija, el andalucista
Julián Álvarez, si bien éste declinó
comparecer ante la opinión pública. Tampoco atendio
la llamada de este diario el delegado provincial de Salud, Francisco
Cuberta.
Información:
Manuel Rodríguez / F. Veiga - El Correo de Andalucía
(24/1/03)
VELEIDAD POLÍTICA
por Bernardo Santos
A estas alturas de la epidemia de legionella
en España las autoridades conocen sus causas y las medidas
para atajarla. Como en otros casos, la falta de medios y la
falta de autoridad son responsables de que persistan situaciones
de riesgo. Las alarmas de salud, los problemas alimentarios
y los desastres ecológicos son problemas políticos,
porque políticas son algunas de las causas que los generan.
Pero es lamentable que se conviertan en escándalos mediáticos
yen instrumentos de la politiquería. Desde esta óptica,
hubo quien quería demostrar que Andalucía era
inmune a la legionella, pues los casos más ventilados
se circunscribían a otras comunidades. Por eso aplaudo
la transparencia con la que la Junta ha reconocido el caso y
la diligencia en tomar medidas.
Hay que lamentar, sin embargo, la falta de autoridad para que
el hospital San Sebastián cumpla las medidas preventivas.
Dicho centro arrastra problemas económicos que pueden
estar en la raíz de este incumplimiento. Así se
paga la veleidad de mantener este hospital bajo titularidad
municipal (al igual que el de Morón) y no en la red del
SAS.
(Secretario local de Defensa
de la Sanidad Pública).