El DOMINGO, DÍA 31 DE MAYO de 2009, se va a realizar
un VIA LUCIS, que es una pequeña procesión, con
la Imagen de Cristo Resucitado portado en andas por hombres
y mujeres.
A lo largo del recorrido se leerán una serie de pasajes
relacionados con la Resurrección de Nuestro Señor
(estaciones).
Se saldrá desde la Parroquia Mayor de Santa Cruz a las
10,00 de la mañana y se desarrollará por las siguientes
calles de la feligresía:
Pza. Ntra. Sra. del Valle - José Canalejas - Santa Florentina
- Lebrija - Bizco Pardal - Saltadero - Secretario Armesto -
Zayas - Pza. Ntra. Sra. del Valle – Templo.
Finalizará este recorrido con la SANTA MISA en la Parroquia
Mayor de Santa Cruz a las 11,30 de la mañana.
Este VIA LUCIS es el primero que se va a realizar en la ciudad
de Écija
El significado del VIA LUCIS.
Hay una devoción popular con tradición desde
la edad media, que es el Via Crucis (el camino de la cruz).
En él se recorren los momentos más sobresalientes
de la Pasión y Muerte de Cristo y contemplándose
de desde la oración en el huerto hasta la sepultura.
En los últimos años, a estas estaciones, Juan
Pablo II añadió la Resurrección. Pero ésta
es la primera parte de una historia que no acaba en un sepulcro,
ni siquiera en la mañana de la Resurrección, sino
que se extiende hasta la efusión del Espíritu
Santo y su actuación maravillosa.
Desde el Domingo de Pascua hasta el de Pentecostés hubo
cincuenta días llenos de acontecimientos, inolvidables
y trascendentales, que los cercanos a Jesús vivieron
intensamente, con una gratitud y un gozo inimaginables.
De igual forma que las etapas de Jesús camino del Calvario
se han convertido en oración, queremos seguir también
a Jesús en su camino de gloria. Éste es el sentido
último de esta propuesta, una invitación a meditar
la etapa final del paso de Jesús por la tierra.
El Via Lucis, "camino de la luz" es una devoción
reciente que completa la del Via Crucis. En ella se recorren
catorce estaciones con Cristo triunfante desde la Resurrección
a Pentecostés, siguiendo los relatos evangélicos.
Se incluye también la venida del Espíritu Santo
porque, como dice el Catecismo de la Iglesia Católica:
"El día de Pentecostés, al término
de las siete semanas pascuales, la Pascua de Cristo se consuma
con la efusión del Espíritu Santo que se manifiesta,
da y comunica como Persona divina”
La devoción del Via Lucis se recomienda en el Tiempo
Pascual y todos los domingos del año que están
muy estrechamente vinculados a Cristo resucitado, y por supuesto
el Domingo de Pentecostés.