Écija
pone en marcha una ruta turística en torno a la devo-ción
al Rosario como cuna de la costumbre de su rezo diario
La
ciudad de Écija ha puesto en marcha una ruta turística
en torno a la devoción al Santo Rosario, ya que es
cuna de la costumbre de su rezo diario implantado en 1883
por el Papa León XIII. El producto, llamado `Écija
Mariana, la Ciudad del Rosario´, incluye acompañante
durante la mañana y la tarde así como la organización
de las visitas a los museos y monumentos que lo conforman,
asistencia a la celebración litúrgica y almuerzo
en un restaurante del municipio.
El delegado
de Turismo, Comercio y Deporte, Francisco Obregón,
presentó ayer esta iniciativa que “responde al
segundo segmento en importancia en Andalucía, el cultural,
por detrás del tradicional de sol y playa”. Además,
recalcó Obregón que el turismo cultural “relacionado
con alguna creencia mueve a uno de cada cuatro turistas que
visitan nuestra comunidad”. En el acto lo acompañó
también el alcalde de Écija, Juan Wic.
El itinerario,
de un día, recorrerá lugares emblemáticos
como la Iglesia de Nuestra Señora y el Museo Arqueológico
Parroquial, los miradores, iglesias, fachadas y yacimientos
de la plaza del salón, la Iglesia de San Juan, el Palacio
de Peñaflor, el arco de Belén, la calle Mármoles,
la parroquia de Santiago, la Iglesia de los Descalzos, la
de Santa Cruz y el Museo de Arte Sacro. La ruta termina en
la Capilla de la Virgen del Rosario, en el convento de Santo
Domin-go y Santiago, donde se celebra la misa y se reza el
Rosario. El precio del producto es de 20 euros.
La idea,
desarrollada por la asociación Conocécija con
la colaboración de la Consejería de Turismo,
Comercio y Deporte y el Ayuntamiento de Écija, parte
de la historia del padre dominico José Peralta, natural
de la Ciudad del Sol, que vivió en el convento local
de Santo Domingo y San Pablo. Desde allí impulsó
el rezo del Rosario Perpetuo y la consagración del
mes de octubre a la Virgen del Rosario, cuya archicofradía
está ubicada en el convento. Poco después de
su muerte, en septiembre de 1883, el Papa León XIII
hizo suya dicha intervención elevándola a costumbre
de validez universal. Desde ento-nes, el mes de octubre es
el mes del Rosario para toda la Iglesia.