En dos meses está previsto que comiencen las obras de
construcción en Écija de una estación para
la Inspección Técnica de Vehículos (ITV),
que acometerá la empresa pública Verificaciones
Industriales de Andalucía S.A. (Veiasa), y cuyos promotores
confían esté terminada antes de 2006.
La futura ITV ecijana se levantará en una parcela de
7.000 metros cuadrados y en torno a 1.300 construidos, a cuatro
kilómetros de Écija en la salida de la ciudad
hacia Córdoba, en la A-4, en los terrenos del conocido
Cortijo de los Abades. La inversión inicial de la fase
de construcción de la estación supera los 750.000
euros.
Una vez en funcionamiento, la de Écija será la
segunda ITV en la denominada zona 2 de la provincia de Sevilla,
donde por el momento sólo presta servicio la estación
de Osuna, la más cercana al municipio astigitano y usada,
por tanto, por los vecinos de Écija para pasar la revisión
técnica de vehículos.
"No hablamos de una infraestructura que prestará
servicio única y exclusivamente a Écija, sino
que, por su ubicación, podrá ser utilizada por
más de 126.000 habitantes, la población total
de la zona 2", apunta Jesús Nieto, director general
de Industria, Energía y Minas de la Junta de Andalucía.
Los municipios de Écija y La Luisiana suman más
de 42.000 habitantes, prácticamente un tercio de la población
total de la zona de influencia de la futura ITV astigitana que
se amplía, además, con los municipios limítrofes
de la cercana provincia de Córdoba.
Este dato avala la idoneidad de la ubicación de la estación
técnica en Écija, según Nieto, a lo que
se une "la disponibilidad de los terrenos que el ayuntamiento
pone a disposición de Veiasa", en una situación
de comunicación viaria "ideal para acercar este
servicio a los ciudadanos".
La capacidad de inspección inicial de esta estación,
en un horario de apertura de 40 horas semanales será
de 60 vehículos por línea y día (la ITV
de Écija tendrá dos líneas de inspección
de vehículos), lo que significan unas 15.000 inspecciones
por línea y año, aunque Veiasa confía en
poder alcanzar las 100 inspecciones por línea y día
"cuando se implante el horario de apertura de 60 horas
a la semana".
En una primera fase, la futura ITV de Écija contará
con un edificio construido de 1.270 metros cuadrados con dos
líneas de inspección, que en el futuro se podrá
ampliar a otra más, además de preverse una futura
nave para el desarrollo de otras áreas dentro del campo
de la reglamentación industrial. En concreto, dispondrá
de una línea de inspección universal y otra para
vehículos ligeros. La primera dotada con una cabina insonorizada
de 21 metros de longitud dotada de opacímetros para la
realización del control de humos en los vehículos
diesel, analizador de gases para vehículos de gasolina,
báscula, frenómetro universal, alineador de dirección
y foso de inspección con detector de holgura, gato móvil
y regloscopio. Y los mismos medios en la segunda de las líneas
de inspección, salvo que la cabina será de 7 metros
de longitud y contará, además, de frenómetro
para motocicletas. A eso hay que sumar una amplia relación
de medios auxiliares para ambas líneas e instalaciones
generales de oficina.
Con la construcción de la ITV en Écija se cumple
uno de los principales compromisos del gobierno municipal (PSOE-IU),
destacó el alcalde de la ciudad, Juan Wic, al mismo tiempo
que se da respuesta a una demanda muy extendida en Écija
y su comarca. Disponer de una ITV permitirá a los ecijanos
“ahorrar tiempo y molestias innecesarias” al tiempo
que crea empleo en la ciudad, remarcó.
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