100 libros para compartir todos los jóvenes de Écija a través de la iniciativa “Soy Libro Libre”

El Área de Juventud del Ayuntamiento de Écija y el Instituto de la Juventud invitan a todos los jóvenes de Écija a leer uno de estos cien ejemplares para luego tomar la decisión de “dejarlo volar”, es decir, compartirlo gratuitamente con otras personas. Para comenzar, los puntos clave serán la Casa de la Juventud, el Rincón Lector La Galatea, los Patios de los diferentes Centros de Secundaria, algunos bares, etc.

La Casa de la Juventud de Écija ha acogido esta mañana la presentación de la iniciativa “Soy Libro Libre” con una treintena de alumnos de diferentes cursos del IES Vélez de Guevara.

A este acto de fomento de la Lectura han asistido el Coordinador Provincial del Instituto Andaluz de la Juventud, Francisco Bernal y el Alcalde de Écija Juan Wic, a quienes también han acompañado la Delegada de Juventud y Deportes, Carmen López, y el Delegado de Ciudadanía, Fernando Martínez.

Esta actividad de “Soy Libro Libre" está organizada por la Dirección Provincial del Instituto Andaluz de la Juventud en Sevilla, junto con el Área de Juventud y Deportes del Ayuntamiento de Écija, y tiene como objetivo fomentar la lectura a través de un concepto novedoso en nuestra ciudad, aunque no en otros lugares del país: la idea de encontrar en lugares inesperados un buen libro, disfrutarlo y, una vez leído, compartir con otros esta experiencia dejando el libro donde otros también lo puedan leer. Para ello 10 jóvenes voluntarios distribuirán por Écija 100 títulos.

Este movimiento aparecido en distintas ciudades de Latinoamérica y Europa como son Buenos Aires, Santiago, Madrid, Barcelona, etc. consiste en liberar (dejar) un libro en lugares públicos tales como autobuses, parques, cabinas telefónicas, centros comerciales, transporte público, mesas de restaurantes y demás sitios similares.

De esta forma se hace de la lectura un acto cotidiano y divertido, y en un ejercicio de generosidad basado en el lema: “Recoge tu libro y cuando lo leas vuélvelo a soltar”.

La liberación tiene una regla clave: el libro que sea liberado (regalado, donado, ofrecido, etc.) pertenece al lector el tiempo que tarde en leerlo, para después liberarlo y que otra persona lo encuentre y pueda a su vez disfrutarlo, y así, sin que la cadena se rompa.