La espectacular marcha del Sevilla B, con extraordinarios resultados
en la competición liguera y proyectando jugadores a la
primera plantilla del club, está haciendo que los aficionados
se sientan atraídos aún más por la cantera
y por la evolución técnica de todos sus componentes.
El filial sevillista atraviesa un momento dulce, transmite
ilusión y ocupa una destacadísima posición
en el Grupo IV de Segunda B. En la última jornada se
impuso con claridad al Ceuta, líder.
El domingo juega en Écija, en un duelo provincial que
ha despertado una gran expectación en la localidad astigitana,
a pesar de que Écija ha perdido mucho fuelle en las últimas
jornadas.
A partir de las cinco de la tarde, con el onubense Santana
Ponce de árbitro, el San Pablo ecijano podría
convertirse en un «hervidero» que puede condicionar
el desarrollo del juego, con un equipo local que aún
no ha perdido la confianza y con un filial muy cualificado para
superar a cualquier rival.
El técnico Manolo Jiménez, que realizará
hoy su último entrenamiento, fijará la atención
en jugadores que en los últimos días han sufrido
procesos gripales. Son los casos de Álvaro, Jonathan
y Moreno.
Por su parte, el Alcalá, que el pasado domingo se tomó
un respiro ante el Écija, al que venció por la
mínima, y salió de los puestos de descenso, viaja
a Jaén para enfrentarse a un histórico venido
a menos que figura en la zona de los mediocres.
En La Victoria, el Alcalá tiene grandes posibilidades
de puntuar, aunque cuente con las bajas de Pana y Pavón.
El partido será dirigido por el andaluz Ariza Villanueva
a partir de las 16:30 horas.
Toda la Información en: