El alcalde de Ecija, Juan Antonio Wic y la delegada de Obras
Públicas, Elena Palacio han visitado hoy las obras de
la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR), cuyas
obras han comenzado esta semana, y que cuenta con un presupuesto
de 3.868.709 euros, informó hoy el Ayuntamiento.
Las obras serán financiados por la Consejería
de Obras Públicas de la Junta de Andalucía, mientras
que el Ayuntamiento se hará cargo del pago de las expropiaciones,
que asciende a la cantidad de 150.106 euros, con lo que el municipio
cumplirá con la normativa europea que ya ha sancionado
con un total de 60.000 euros.
El proyecto de la EDAR tiene el objetivo de recibir y tratar
los vertidos de aguas residuales urbanas de la localidad, dando
cumplimiento a la Directiva 271/91 de la Comunidad Económica
Europea que establece la obligación de depurar las aguas
residuales urbanas en todos los núcleos de población
mayores a 2.000 habitantes.
Wic expresó su satisfacción por el cumplimiento
de la normativa y la protección al medio ambiente situando
el comienzo de esta obra como parte del proyecto que engloba
la segunda fase de la corta, con la recuperación del
cauce antiguo del río Genil, la futura construcción
de recolectores y las obras iniciadas de la Estación
Depuradora de Aguas Residuales.
Elena Palacio, por su parte recordó que el incumplimiento
de la normativa europea ha provocado que el municipio fuera
sancionado en varias ocasiones, durante los años 2002
y 2003, por un total de más de 60.000 euros y estas obras
suponen el paso definitivo para que la Estación Depuradora
sea una realidad.
Las sanciones fueron la consecuencia de la paralización
del proyecto por parte del anterior Gobierno Municipal del PA
que «ni siquiera en su último año de mandato,
en la elaboración de los presupuestos del 2003, tuvo
en cuenta la aportación municipal para realizar las expropiaciones
a pesar de que el Proyecto ya se encontraba aprobado por la
Junta de Andalucía».
Las obras tienen un plazo de ejecución de 16 meses y
6 meses de puesta en marcha y está atribuida a la empresa
pública de Gestión de Infraestructuras Andaluzas,
S.A. (GIASA) y licitada y adjudicada a la UTE SANTO INFILCO.