DOS ECIJANOS, ANTONIO DE VILLACRECES Y AGUILAR Y ANTONIO FERNANDEZ MONTIEL, NACIDOS EN EL SIGLO XVI, OIDORES DEL REINO DE ESPAÑA EN LAS INDIAS OCCIDENTALES por Ramón Freire
Abril 2018
Ramón Freire Gálvez.
Comienzo, conforme a las definiciones del diccionario del Real Diccionario de la Academia Española, diciendo que Oidor, era la denominación de los jueces miembros de las Reales Audiencias o Cancillerías, tribunales colegiados originarios de Castilla, que se convirtieron en los máximos órganos de justicia dentro del Imperio español. Su nombre proviene de su obligación de escuchar (oír) a las partes en un proceso judicial, particularmente durante la fase de alegatos.
Pues bien, Écija, en la fecha que nos ocupa y designados por el Reino de España, tuvo el privilegio de contar con dos oidores en las Indias Occidentales.
Comienzo con ANTONIO DE VILLACRECES Y AGUILAR. Nació en Écija, siendo bautizado el día 27 de Marzo de 1566 en la Parroquia de Santa María, hijo de Francisco de Villacreces y Juana de Aguilar, siendo padrino Don Miguel de Eraso (Libro de Bautismos 6, página 231, Parroquia de Santa María).
El Ldo. Andrés Florido, cuando publica en 1632 su libro Grandezas de Écija, Adición al libro de Écija y sus Santos, igualmente fecha cercana a la de vivencia del ecijano que nos ocupa, recogida dentro del capítulo titulado: También Écija es grande por los varones que en santidad, religión y letras ha producido, sección quinta: Catedráticos y maestros, oidores y colegiales, escribe:
“…Allá en las Indias tenemos dos oidores de excelentes prendas (el otro a que se refiere Florido es Antonio Fernández Montiel de quien escribimos más adelante), que por ser tan grandes letrados subieron al puesto que habemos dicho, sin subir muchos escalones.
El uno D. Antonio de Villacreces y Aguilar, oidor de Guatemala; los renombres tan conocidos dicen quién es, fue hijo del letrado de más estima que en su tiempo se conoció…”.
Inicio la reseña biográfica sobre este ecijano, que llevo el nombre de la Ciudad que le vio nacer a las Indias Occidentales, en esta ocasión a Guadalajara de la Nueva Galicia, diciendo que:
La Audiencia y Cancillería Real de Guadalajara o de Nueva Galicia fue el máximo tribunal de la Corona española en el territorio de Nueva Galicia, del
Virreinato de Nueva España… Tercera y última capital de la Nueva Galicia. El día 13 de febrero de 1548, el emperador Carlos V, estableció en Compostela una Audiencia de Cuatro Oidores, iniciando sus funciones el 21 de enero de 1549. En julio de 1549, Compostela fue sede del primer Arzobispado de la Nueva Galicia, por bula papal su Obispo recibió el título de compostelano. El día 10 de mayo de 1560, la Audiencia y el Obispado fueron trasladados desde Compostela a Guadalajara, que se convirtió en la tercera y última capital de la provincia del Reino de la Nueva Galicia… Nueva Galicia, nombre que se dio a lo que se consideró en cierta medida como un reino aparte dentro del virreinato de Nueva España, que abarcaba principalmente los actuales territorios de Nayarit, Jalisco, Colima y Aguascalientes, así como también algunas zonas de Zacatecas, San Luis Potosí y Durango.
La conquista de ese territorio la consumó Nuño Beltrán de Guzmán. Su primera capital se estableció en Compostela, en el actual Nayarit. En 1549 se dio personalidad jurídica a la que se conoció como audiencia de la Nueva Galicia, independiente de la de México.
En la ciudad de Guadalajara se estableció en definitiva, un obispado sufragáneo del arzobispado de México. Al alterarse las divisiones políticas de la Nueva España en tiempos del rey español Carlos III, la Nueva Galicia paso a ser intendencia de Guadalajara. (Wikipedia la enciclopedia libre).
ARTÍCULO COMPLETO EN FORMATO PDF:
★DOS ECIJANOS DEL S.XVI EN LAS INDIAS OCCIDENTALES
Lo siento no hay comentarios todavía, pero puedes ser el primero en comentar este artículo.
Escribe un comentario