79 y 80 BENDICIÓN DE LA BARRIADA BEATO FRANCISCO DIAZ por Juan Méndez Varo
Concluida la guerra civil, se inician tímidamente algunos planes de viviendas sociales de iniciativa pública, que llevaron a cabo los extinguidos organismos: Instituto Nacional de la Vivienda, Obra Sindical del Hogar, Administración del Patrimonio Social y Urbano, Dirección General de Regiones Devastadas, Delegación Nacional de Sindicatos y también otros de iniciativa municipal.
Estos organismos, aprovechando distintos baldíos, ejecutaron diferentes núcleos de viviendas unifamiliares adosadas, como los grupos General Mola y Queipo de Llano, Grupo San Pablo, etc.
En los años cincuenta se inicia la construcción de viviendas plurifamiliares o “pisos”, como el grupo Santa Ana, cuya entrega de títulos se llevó a cabo el día 13 de marzo de 1960 y, posteriormente en el decenio de los sesenta el grupo de viviendas de San Hermenegildo.
A raíz de la publicación del Decreto Ley de 8 de marzo de 1962, se construyen los denominados grupos U.V.A., viviendas del mismo diseño y calidades, siendo además todas idénticas, unifamiliares de dos plantas con 70’26 metros cuadrados, concebidas para albergar provisionalmente a familias en situación extrema.
En Écija se construyeron, extramuros de la ciudad, y en el lugar conocido por Pinichi 148 alojamientos para ser cedidos a los beneficiarios a título de precario. Con fecha 22 de julio de 1964, el Instituto Nacional de la Vivienda y el Ayuntamiento de Écija, suscribieron un convenio para la utilización y conservación de la barriada, y en virtud del cual, la administración local asumía la administración del conjunto, “que tendrá para él el mismo concepto que cualquier otra barriada de la ciudad, si bien reconociendo a la misma sus peculiares características”.
El municipio era también el encargado de proponer las familias para ocupar los alojamientos, directamente afectadas por la situación de necesidad, si bien, -según se recogía expresamente en el convenio “serán excluidas de la adjudicación, y por tanto no podrán ser beneficiarias las personas que lleven vida de grave escándalo público, puedan ser estimadas en el concepto legal de vagos y maleantes, o no tengan medios de vida conocidos.”
La entrega de las llaves a las 148 familias seleccionadas se efectuó en el salón de plenos del Ayuntamiento de Écija, en el mes de noviembre de 1964, contando con la presencia del Ministro para Sevilla, Pedro Gual Villalbí y el Gobernador Civil, José Utrera Molina. Desde el Ayuntamiento se desplazaron autoridades provinciales y locales, a la nueva barriada, donde el arcipreste procedió a su bendición.
me gusta es lastima que no pongan mas fotos de Ecija antiguas